- Septiembre ratifica la estacionalidad del mercado laboral
- La contratación retrocede respecto a septiembre pasado y Cantabria se estanca en solo el 30% de contrato indefinidos
- Es preocupante el descenso de afiliación y por tanto de cotizantes al sistema de Seguridad Social.
Los datos de empleo correspondientes al pasado mes de septiembre que se han dado a conocer hoy ratifican la tendencia que ya se vislumbraba el mes de agosto. El mercado laboral ha ralentizado su actividad como consecuencia de final de la campaña estival.
Para la directora general de CEOE CEPYME Cantabria, Isabel Cuesta, “los datos de empleo de septiembre son una repetición de lo que hemos visto en septiembres anteriores al final de la temporada estival: incremento en el número de parados que se concentran en los sectores más vulnerables, mujeres, jóvenes y demandantes de primer empleo. Aunque los datos son mejores que el pasado año, no debemos esconder la realidad del estancamiento de nuestro mercado laboral”.
En su opinión, lo más preocupante de los datos de empleo del mes pasado es lo referente a la contratación. “Cantabria está por debajo del nivel de contratación del año pasado en estas fechas y esto hay que interpretarlo como un signo claro de frenazo de la actividad económica en todos los sectores”. Para Cuesta también es muy negativo el dato de contratos indefinidos, “que no supera el 30% y se está convirtiendo en tendencia. Estamos trece puntos y medio por debajo de la media nacional y eso es una mala referencia”.
Otro dato negativo que destaca la directora general de la patronal cántabra es lo relativo a la afiliación a la Seguridad Social que ha descendido en más de 6.000 cotizantes respecto al mes de agosto. “En un mes se ha perdido prácticamente el 90% de los nuevos afiliados conseguidos en los tres meses anteriores y el 40% de los conseguidos en todo el año 2023. Esto supone una merma importante en las cotizaciones al sistema de Seguridad Social”, ha subrayado Cuesta.
En resumen, en septiembre se constata el efecto claro del fin de la época estival con una especial influencia negativa en el sector servicios que provoca subida de paro, en particular de personas jóvenes y mujeres, la pérdida de contratos y el descenso en el número de afiliados.
